Venezuela, lucha por la libertad
Creo que todos hemos visto lo que están viviendo nuestros hermanos latinoamericanos en Venezuela, al escuchar las noticias tenemos sentimientos encontrados, ya que sabemos que hay gente que está poniendo en riesgo su vida, pero por otra parte nos alegramos porque están luchando por la libertad y el futuro de sus hijos.
Pero ¿por qué el hombre lucha por la libertad a pesar del peligro de muerte? Porque sin libertad no hay vida, no hay nada. Las cuatro libertades fundamentales conforme al discurso emitido el 6 de enero de 1941 por el presidente de los Estados Unidos de América Franklin D. Roosevelt son: libertad de expresión, libertad religiosa, libertad de vivir sin penuria y la libertad de vivir sin miedo.
La libertad es la que te permite ejercer la profesión que quieras, casarte con la persona que amas, salir a la calle sin temor de ser detenido y a expresar lo que piensas sin miedo a la represalia.
En nuestro país, ya hemos vivido algo similar por la lucha de nuestra libertad, primero con la Independencia de México que puso fin al dominio español e inició con el Grito de Dolores el 16 de septiembre de 1810 y el segundo refiere a la Revolución Mexicana, evento que estalló el 20 de noviembre de 1910 para terminar con la dictatura de Porfirio Díaz.
Otro evento relevante a nivel mundial lo encontramos en el año 133 a.C. en Numancia una desaparecida población de España donde sus habitantes prefirieron suicidarse antes de estar bajo las órdenes de los romanos, pueblo que ha pasado a la historia como ejemplo de resistencia, acuñándose en la expresión “resistencia numantina”.
Por todo lo anterior, puede notarse que el hombre con la finalidad de pelear por su libertad es capaz de sacrificar su propia vida, luchando por su desarrollo humano y la de sus hijos.
El desarrollo humano, es un concepto que empezó a desarrollarse a partir del 1990 y puede definirse como el proceso de ampliación de las opciones de las personas y mejora de las capacidades humanas. El desarrollo humano está relacionado con: una vida larga y saludable; acceso a la educación y a una vida digna; a participar en las decisiones de su comunidad; a la libertad política, económica y social; a las oportunidades para tener una vida creativa y productiva; a la garantía de sus derechos humanos; a la equidad de género y un medio ambiente sustentable, entre otros.
Cabe señalar, que el desarrollo de un país no puede ser entendido únicamente desde la perspectiva económica, sino también con la calidad de vida de sus habitantes y la posibilidad de realizar a plenitud su potencial como seres humanos. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) es quien mide los logros promedio de un país en cuanto a su desarrollo humano mediante el Índice de Desarrollo Humano (IDH). Los tres elementos que se toman en cuenta para esta medición son: una vida longeva y sana; el conocimiento, medido por la tasa de analfabetismo y el nivel de vida decente, medido por el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita.
En el Informe del PNUD del 2018, se observa que Venezuela cayo dieciséis puestos en el IDH respecto a 5 años anteriores, lo que se trata de unos de los mayores retrocesos en el indicador, la renta per cápita de Venezuela disminuyó en un 25.8% entre 1990 y 2017.
Los venezolanos están luchando para que en un futuro puedan tener acceso a una buena alimentación, educación y por el respeto de sus derechos humanos, políticos, económicos y sociales.
Los comentarios están cerrados.