Por su ubicación, diariamente en el adoratorio a Ehécatl, localizado en la estación Pino Suárez Línea 2, personal de limpieza del Sistema de Transporte Colectivo Metro recolecta una amplia gama de objetos y materiales desechables que son arrojados al monumento, como envases de plástico, bolsas de frituras, vasos y platos desechables, entre otros.
La Coordinación de Cultura del Metro coordina y supervisa el aseo del entorno inmediato al monumento. Todas las mañanas, empleados de intendencia barren y retiran la basura del piso, no solo para mantener la buena imagen de éste, sino para evitar acumulación de desechos que puedan afectar al patrimonio cultural y arqueológico del Metro.
El Sistema de Transporte Colectivo exhorta a quienes transitan por el exterior de la estación a evitar aventar basura hacia la zona de la también conocida “Pirámide del Dios del Viento”, a fin de preservar el valor arqueológico de la misma.
El adoratorio a Ehécatl, de la cultura Mexica, se mantiene en el lugar de su hallazgo, que ocurrió entre 1968 y 1970, cuando se construían las dos primeras Líneas del Metro. Los usuarios pueden apreciarlo mientras caminan por los pasillos que enlazan las Líneas 1 y 2 en Pino Suárez, y el público en general, desde la parte superior de la estación, en la explanada de la plaza del mismo nombre.
Cabe mencionar que a partir de su descubrimiento, hace cinco décadas, la información recolectada sobre esta pieza arqueológica contribuyó a fundamentar una de las más importantes leyes en materia de protección al patrimonio cultural de nuestro país: la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas y sentó las bases a la Dirección de Salvamento Arqueológico para proteger el patrimonio arqueológico, histórico y su entorno, durante el desarrollo de obras públicas o privadas.
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