Las elecciones internas del Movimiento de Regeneración Nacional, que ya no es movimiento, ni es de regeneración, Morena pues, fueron un dejavú político de la izquierda mexicana.
Se repite la historia que hundió al Partido de la Revolución Democrática, el PRD. Grupos de una izquierda dividida, pero ávida de poder, tomó el control del partido mediane “golpes políticos” a los centralistas mediante asambleísmo cuasi estudiantil, hasta con violencia.
Así tumbaron un partido que representaba una izquierda madura y negociadora, sin radicalismos o fanatismos, como lo habían confeccionado sus fundadores, Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, allá en los ochentas, cuando Miguel de la Madrid lo marginó de la política priista.
Allí llegaron otros priistas y radicales de izquierda. Entre los priistas llegaron Andrés Manuel López Obrador y muchos más, que no veían futuro para sus ambiciones políticas en el PRI.
Entre los izquierdistas maoístas, troskistas, socialistas de plastilina y vino tinto, los invasores de tierras y viviendas, los comunistas, los anarquistas de pura cepa, exguerrilleros y muchos más, acabaron con esa organización política. No trato de defender al PRD, simplemente hago una referencia histórica de lo que ocurrió con los “amarillos”.
Esas guerras intestinas por el poder y, obviamente, el dinero, llevaron a marginan a muchos de los puestos administrativos, donde amasan fortunas para ellos y sus grupos.
Un factor que ayudó a Morena, en ese entonces movimiento y ahora partido, a fortalecerse con una figura que había sido maltratada por el sistema político priistas y panista, como Andrés Manuel López Obrador.
Por ello, hoy, se ve como el partido de un solo hombre, quien ha sido santificado a nivel de cuasi dios, por sus fieles seguidores que, por sus carencias académicas, morales y profesionales, nunca habrían soñado con estar donde están. Son agradecidos, como le gusta a AMLO. Son 95% leales, aunque tengan una capacidad para tener esos puestos para el servicio del pueblo, de sólo el 5%.
Así se diseñó por el círculo dorado (ojo no el rojo) más cercano al actual Presidente de la República. Todo para su servicio personal y para dejarlo como “héroe”.
Pero, vamos a las elecciones del domingo pasado en torno a Morena. Durante el II Congreso General Ordinario, donde hubo de todo, hasta regalos finos a los consejeros como “maletas de marca”, hasta el paseo de las llamadas “corcholatas” de AMLO. Ahí, se ratificó a Mario Delgado como presidente del partido, y como presidente del Consejo a Alfonso Durazo.
Este equipo será el que definirá al candidato presidencial en el 2024. Todo bajo la línea directa y hasta caprichosa, de López Obrador, el gran elector morenista. Quien él determine, será el candidato.
Sin embargo, los mensajes no escritos y a los que no se dio acuse de recibido oficial, fueron los que marcan a ese partido, que ahora está definido como una organización de tribus, como ocurrió en el PRD.
Esas tribus, son las mismas que en su ambición de poder y dinero, hundieron al PRD. Pero, ahora hay más. Se trata de los grupos que tienen apoyos empresariales muy poderosos, sobre todo en el ramo de la construcción; los políticos del sureste; los administradores públicos con experiencia y ciencia.
López Obrador cometió un error en su partido: dar a conocer sus preferidos para la sucesión presidencial y marcar a los que no lo son. Por ello, además de las múltiples tribus, sumen a los aliados de Claudia Sheinbaum, Adán López, Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal.
Habrá un dejavú perredista.
PODEROSOS CABALLEROS
¿PASARÁ LA LEY DE LAS FUERZAS ARMADAS EN EL SENADO?
Ante el comienzo de la discusión del dictamen que prolongaría hasta 2028 la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles desplegando labores de seguridad, el coordinador de Morena en al Senado Ricardo Monreal admitió que aún no hay consenso para alcanzar la mayoría calificada, pues los legisladores opositores mantienen una postura inamovible. Las negociaciones con las fracciones de los partidos opositores han sido intensas, y reveló que ya se ha reunido con los coordinadores, así como con funcionarios públicos federales, pero aún no ha obtenido consensos. Pero todo es muy claro. AMLO necesita de las habilidades legislativas de Monreal para lograr que las tropas se queden en las calles hasta el 2029, lo que le da un amplio margen para controlar cualquier tipo de crisis social que se de en el 2024, con el cambio de gobierno. Muchos se preguntan si pasará esa ley en el Senado, por lo que Monreal hará todo lo posible por lograrlo.
LICENCIA DE LOCUTOR POR OPOSICIÓN; LOS POLÍTICOS CUÁNDO
Uno de esos reporteros que nadie sabe de dónde salió, le pidió en la mañanera el Presidente que se retome el examen para extender una licencia de locución para profesionalizar a los conductores de los medios de comunicación. De inmediato AMLO dijo que Gobernación atienda la petición. Si bien en el pasado los locutores tenían que pasar por estrictos exámenes culturales y académicos, ahora no son necesarios. Pero, ¿quiénes serían los sinodales? ¿El gobierno o intelectuales aliados a la 4T? Ahí está el detalle, diría Cantinflas.
RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA: BMV
La Bolsa Mexicana de Valores, que preside Marcos Martínez, tiene un modelo octagonal de Responsabilidad Social: 1. Productos y Servicios, 2. Talento, 3. Capital Social /Alianzas 4. Medio Ambiente, 5. Tecnología, 6. Capital Económico, 7. Capital Intelectual, 8. Gobernanza. Por ello, recibió el premio Anáhuac a la Responsabilidad Social 2022, en la categoría “IDEARSE”.
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