Llama Víctor Fuentes a Gobierno Federal a atender daños ocasionados por Refinería de Cadereyta

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El senador Víctor Fuentes Solís hizo un llamado al gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, para que atiendan los daños a la salud y al medio ambiente que ha ocasionado el uso de combustóleo para generar energía, en especial los producidos por la refinería de Cadareyta, en Nuevo León.

“La refinería de Cadereyta es una fuente de contaminación preocupante para los habitantes de dicha ciudad y de la zona metropolitana de Monterrey. Además, las emisiones de azufre y otros componentes están afectando la salud de millones de personas”, lamentó el senador.

En conferencia de prensa virtual, el legislador explicó que “la generación de electricidad y la refinación de petróleo aportan casi el 70 por ciento de las emisiones en el área metropolitana de Monterrey, además que aporta el 81 por ciento del dióxido de azufre y el 20 por ciento de partículas dañinas”.

En el mismo sentido, dijo, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) informó que en el 2018 la refinería de Cadereyta emitió más de 14 mil toneladas de contaminantes a la atmósfera, destacando las más de 8 mil toneladas de dióxido de azufre y más de mil 700 toneladas de partículas. Además, emite benceno, sustancia que se ha asociado con el desarrollo de leucemia por exposición prolongada.

Explicó que existe la posibilidad de reducir el impacto negativo que genera la refinería de Cadereyta si se sustituye el combustóleo por gas natural, medida que diferentes países del mundo han comenzado a poner en marcha, en una búsqueda por garantizar el derecho a la salud de sus habitantes.

“Esta medida tiene beneficios tanto ambientales como económicos, con un costo de sólo 25 dólares por tonelada, lo que equivale aproximadamente a 550 pesos, el cual es muy bajo si lo comparamos con los gastos asociados a los daños que generan los contaminantes a la salud de los neoleonenses”, puntualizó el senador.

Asimismo, propuso clausurar la refinería de Cadereyta como otra opción para contrarrestar el daño causado a los habitantes de esta zona, y aprovechó para recordar el cierre en 1991 de la refinería de Azcapotzalco con la finalidad de mejorar la calidad del aire y de proteger la salud de la población.

El legislador federal dijo que en México estamos viviendo un retroceso al apostar por estos métodos obsoletos y al dar la espalda a las opciones sustentables, como el uso de paneles solares.

“Si el Presidente escuchara a la gente, a especialistas energéticos, si viera lo que está ocurriendo en todo el mundo, entendería que apostar en refinerías es una mala decisión: obsoletas, caras y con graves afectaciones a la salud y el medio ambiente. Es urgente que se tomen cartas en el asunto y se trabaje a favor de la gente”, concluyó.

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