La semana pasada, un grupo de estudiantes de las universidades que fundó en su gobierno, por el paso que tuvo en la Ciudad de México, Andrés Manuel López Obrador, se manifestaron por la falta de aulas, inasistencias de los maestros, horarios incompletos y planes de estudio similares a otras universidades públicas, y que decir, de las privadas.
Esos jóvenes, en su legítimo derecho de exigir a las autoridades, que reciben ¡mil millones de pesos anuales! Exigir aulas, planes de estudio hechos profesionalmente y no sobre las rodillas y al “ahí se va”, por los administradores de esas escuelas, encabezados por Raquel Sosa, titular del organismo coordinador de la Universidades para el Bienestar.
Regañó a los estudiantes de Tlalpan que ayer pidieron frente a Palacio Nacional salones, maestros, clases y horarios completos, pues afirmó que en esas escuelas «no cabe demasiado el confort» y afirmó que a ellos los rechazó la UNAM.
¡Cómo se atreven a cuestionar al jefe de jefes! No se dan cuenta el esfuerzo que hace por gobernar al país y ustedes distrayéndolos en banalidades.
Este tipo de funcionarios, arrogantes ante sus seguidores y ante el Pueblo, en general, sólo ven a su jefe-jefe como el objeto que les da su trabajo; un trabajo que ni en sueños tendrían con jefes que les exigieran trabajo y devoción para la administración pública.
Al cierre de sexenio, ya veremos cómo brotará infinidad de cieno de esos organismos hechos con las patas. Ni fueron mil universidades, pero si se gastaron esos mil millones de pesos.
Claro, que hay un grave problema con la educación en el país. Hacen falta mas universidades públicas y opciones para jóvenes que son “aspiracionistas” y buscan mejorar sus vidas.
De los que hicieron su protesta en Palacio Nacional, eran estudiantes de medicina. Estos jóvenes no cuentan con aulas, laboratorios, ni enseñanza práctica.
No pudieron ingresos a la UNAM, al IPN o a la UAM, así como a otras universidades públicas del país, pero tienen muchas ganas de estudiar medicina.
Sin embargo, estos jóvenes no podrán desempeñar su vida profesional con el ímpetu que tienen como estudiantes. No hay la posibilidad de que tengan empleados en hospitales a menos que logren obtener veces en otras instituciones privadas, donde puedan desarrollarse.
Un título de una universidad de las de López Obrador, difícilmente lograrán ser reconocidos o apreciados. Desafortunadamente, serán mal aprovechados, por que ahora no tienen aulas, maestros, ni siquiera el respeto de las autoridades.
Pero, siguen cacareando en la 4T, que se les da oportunidades a los jóvenes. En lugar de dinero, que les den educación y trabajo. No compren sus votos. Eso es una inmoralidad. Y, si con el dinero que les regalan compran caguamas, es para tratar de olvidar la miseria en la que los sume la falta de oportunidad que esta obligado el gobierno a darles.
PODEROSOS CABALLEROS
FRACASÓ MOFA DE LOS ASPIRANTES DE OPOSICIÓN
Son tan evidentes las acciones del Presidente López Obrador para distraer a la sociedad de los escándalos como el libro del “Rey del Cash”, los Guacamaya Leaks y el nombramiento de personajes que no tienen experiencia en áreas muy sensibles del país, hace unos días le dio clases a la oposición para nombrar a su candidato. Dio a conocer una lista que, para su juicio, son los “aspirantes a la Presidencia”. La verdad hizo una gran lista, para que algunos trasnochados se fueran con la finta. Los canchanchanes presidenciales elaboraron una lista de 43 aspirantes a la presidencia de la República. La verdad, se burló a la oposición. En la mayoría son malos chistes políticos y unos cuantos son realmente personajes que van la pena en la oposición PRI, PAN, PRD. Les platico el por qué la oposición no saca a su candidato de una vez, o cuando menos presenta una terna de la oposición. Y, no es por que el gobierno los persiga, sino que empezaría el debilitamiento de sus jefes de partido. Antes, cuando el Presidente, como ahora, ordena en el partido en el poder, todo es más fácil. El decide y se hace. AMLO dice que necesitan un proyecto de nación, una plataforma y un candidato. Morena, por cierto, sólo tiene la plataforma política que es el regalo de miles de millones de pesos para comprar voluntades y las raterías de los empleados de Bienestar que reciben 2 pesos y dan 20 centavos a los destinatarios de los programas sociales. Así hasta el chimuelo masca tuercas.
RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA: MOVISTAR
Bajo el liderazgo de Camilo Aya Caro, Telefónica Movistar México ratificó su adhesión al programa Alerta Amber, un programa de advertencia temprana que apoya en la búsqueda y localización de niñas, niños y adolescentes desaparecidos que se encuentran en riesgo o peligro inminente de sufrir un daño grave en su integridad, a través de la emisión y difusión de la información del menor en riesgo. Colabora con la FGR, a través de la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas, al coadyuvar en la búsqueda y localización de menores desaparecidos a nivel federal. Así las Alertas Amber que recibe las difunde entre sus usuarios a nivel nacional.
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