La senadora Cora Cecilia Pinedo Alonso urgió al Ejecutivo Federal a enviar al Senado de la República, el Anexo VI del Convenio Internacional para Prevenir la Contaminación por Buques (MARPOL), para su análisis y ratificación.
Mediante un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la integrante del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) destacó que la ratificación de dicho anexo generará beneficios en la salud de las personas y preservación del medio ambiente, pues los problemas ambientales que aquejan a nuestro país, no sólo se dan en las grandes ciudades.
Destacó que a través de los océanos se transporta el 80 por ciento del comercio mundial, además de constituir una importante vía para el transporte de pasajeros, por medio de transbordadores y espacios de esparcimiento para turistas en cruceros.
Pero también, agregó, el transporte marítimo es una fuente importante de contaminación, por lo que la Organización Marítima Internacional (OMI), ratificó el 2 de diciembre de 1973, el Convenio Internacional para Prevenir la Contaminación por los Buques a fin de combatir y atender el impacto en el medio ambiente,
Pinedo Alonso señaló que este Convenio es el instrumento internacional más importante sobre la prevención de la contaminación de medio marino causado por el transporte marítimo y los accidentes derivado de su funcionamiento.
La legisladora por Nayarit precisó que “l objeto fundamental de este Convenio es el de reglamentar las cargas y las medidas que deben ser implementadas ante cualquier derrame, así como el manejo que debe tener el transporte de sustancias que representan riesgos para la salud humana, para la flora, la fauna y la atmósfera, estableciendo reglas para prevenir que éstos tengan efectos contaminantes.
México, dijo, forma parte de los estados que ratificaron el convenio y los dos protocolos que lo conforman; sin embargo en 1997 éste fue modificado al añadirse un Anexo VI, el cual establece las reglas para prevenir la contaminación atmosférica ocasionada por
los buques, que entró en vigor el 19 de mayo de 2005 y no ha sido ratificado por nuestro país.
“El Anexo VI establece los límites de las emisiones de óxidos de azufre y de óxidos de nitrógeno de los escapes de los buques y se prohíben las emisiones deliberadas de sustancias que agotan el ozono; para las zonas de control de emisiones designadas se establecen normas más estrictas en relación con la emisión de Óxidos de Azufre, Óxidos de Nitrógeno y de materias particuladas”. explicó.
La representante nayarita señaló que actualmente los niveles de emisión de óxidos de azufre y de óxidos de nitrógeno fluctúan en aproximadamente 3.5%, por lo que con la implementación de las medidas contenidas en el Anexo VI se busca reducir estas emisiones hasta el 0.50%,
“Considerando que el transporte marítimo es el responsable de la emisión del 2.5% del total de gases de efecto invernadero que se arrojan a la atmósfera, se puede entender la importancia de la adhesión a este Anexo VI”, sostuvo.
Por ello, y como integrante de la Comisión de Marina del Senado de la República, urgió al Ejecutivo Federal a enviar el documento al legislativo para su ratificación, ya que su implementación en las Zonas de Control de Emisiones permitirán un ahorro de aproximado de 4 millones de pesos que se erogan para atender efectos en la salud como fallecimientos prematuros, hospitalizaciones y días de trabajo perdidos.
Además, en términos económicos, se estima que para 2030, los beneficios en la salud asociados con las reducciones en la concentración de partículas oscilen entre 41 y 67 mil millones de dólares.
Y por último, dijo, con su ratificación se daría oportunidad para que México aumentará su potencial en el mercado de combustible marino ecológico.
El punto de acuerdo fue turnado a la Primera Comisión de Trabajo de la Comisión Permanente para su análisis y dictaminación.