La administración del próximo gobierno federal que encabezará Andrés Manuel López Obrador debe dar prioridad a reducir las brechas sociales que vulneran el desarrollo de los derechos de los pueblos indígenas que habitan en el territorio nacional afirmó el Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero”.
Su presidente, José Antonio Lara Duque, advirtió que en México existe el peligro de que varias comunidades se extingan, por ello, es prioritario, impulsar acciones que fortalezcan ámbitos importantes como la educación, salud y empleo.
“Para desaparecer las brechas sociales que aún persisten en el país, a fin de preservar las raíces de sus costumbres y vida, y de esta manera, consolidar un México incluyente, justo y próspero, tal y cómo lo resaltó López Obrador en campaña”, dijo.
El abogado Lara Duque recordó que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), dio a conocer que los pueblos indígenas custodian y perpetúan culturas excepcionales y relaciones con el medio ambiente natural. Asimismo, encarnan una gran parte de la diversidad lingüística y cultural de la humanidad que compartimos.
“Representan una gran diversidad, con más de 5 mil grupos distintos en unos 90 países y hablan más de 7 mil lenguas en el mundo. Se estima que son 370 millones de personas las que componen a los pueblos indígenas, es decir, más del 5 por ciento de la población global. Sin embargo, se encuentran entre las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables representando el 15 por ciento de los más pobres”, dijo.
En México —agregó Lara Duque— se desarrollan prácticamente en todo el territorio nacional, en la capital de la República mexicana tenemos áreas identificadas, particularmente en la rural de Xochimilco, Gustavo A Madero, Cuajimalpa; en casi todo el territorio del estado de México; en Michoacán; en Guanajuato; vamos, en todo el país.
“Las poblaciones autóctonas han buscado durante años que reconozcan sus identidades, su forma de vida y el derecho sobre sus territorios tradicionales y recursos naturales. Pese a ello, a lo largo de la historia, sus derechos fundamentales han sido siempre violados.
“En la actualidad, se encuentran entre las poblaciones más vulnerables y perjudicadas en todo el mundo, por lo que la comunidad internacional reconoce la necesidad de diseñar e implementar políticas públicas orientadas a proteger sus derechos, mantener sus culturas y formas de vida”.
Sólo por dar un ejemplo, hay cinco hombres y una mujer de San Pedro Tlanixco, en el estado de México, en prisión desde 2003, por defender el derecho al agua, con sentencias condenatorias de 50 años, sin que se haya hecho una investigación imparcial y se respeten sus derechos como indígenas nahuas.
“Los presos políticos de San Pedro Tlanixco fueron condecorados este años con el Premio Nacional de Derechos Humanos “Sergio Méndez Arceo”, a fin de reconocerles sus acciones a favor de recibir el vital líquido y que de manera política han sido apresados”, recordó.
Ante este panorama, la situación de la población indígena históricamente ha estado marcada por altos niveles de carencias sociales y económicas que demuestran condiciones de mayor pobreza y vulnerabilidad en comparación con el resto de la población.
Según datos de la Encuesta Intercensal 2015, las entidades federativas que concentran el mayor número de población indígena son: Oaxaca (14.4%), Chiapas (14.2%), Veracruz (9.2%), México (9.1%), Puebla (9.1%), Yucatán (8.8%), Guerrero (5.7%) e Hidalgo (5.0%). En conjunto en estos estados vive el 75% de la población indígena a nivel nacional.
En este contexto, es necesario que el próximo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador; y la titular de la Secretaría de Gobernación asignada, Olga Sánchez Cordero; garanticen el sano desarrollo de este sector vulnerable del país, como lo han dicho y resaltado: “primero los pobres”, afirmó Lara Duque.