México ocupa el primer lugar en maltrato animal en Latinoamérica, derivado principalmente del tráfico para obtener sus pieles, señaló el senador Ricardo Monreal, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena.
Detalló que el país alberga entre 60 y 70 por ciento de la diversidad biológica, sin embargo, aproximadamente dos mil 583 especies mexicanas padecen alguna condición de riesgo. Los mamíferos y las aves son los más afectados.
Resaltó que las prendas elaboradas con piel de un animal exótico, son resultado del sufrimiento de un animal, ya sean criados en granja o cazados en su hábitat. Añadió que son sacrificados con métodos crueles, como asfixia, electrocución, cámaras de gas o envenenamiento.
El senador refirió que en México no existe una regulación que prohíba la importación, exportación y reexportación de las pieles exóticas, lo que motiva un tráfico de pieles sin control, que ha aumentado en los últimos años.
Afirmó que el tráfico de pieles de animales exóticos también amenaza a la biodiversidad del país, ya que entre los decomisos que han hecho las autoridades se encuentran algunos animales en peligro de extinción.
Monreal Ávila apuntó que es escandaloso que para confeccionar un solo abrigo se necesite, por citar algunos ejemplos, la piel de 300 chinchillas, de 60 visones, de 20 focas bebé o de seis leopardos.
Para combatir lo anterior, presentó una iniciativa que plantea reformar la Ley General de Vida Silvestre, para adicionar un artículo 55 Ter que prohíba la importación, exportación y reexportación de ejemplares exóticos, sus partes y derivados con fines comerciales e industriales, así como la utilización de éstos para la producción de pieles y aplicaciones en la industria textil, vestido y calzado.
El texto propone que dichas acciones sean consideradas como infracciones a lo establecido en dicha ley. También impone un plazo, hasta 2021, para que los productores, fabricantes y comerciantes que utilicen ejemplares exóticos, sus partes y derivados para elaborar diferentes productos, los retiren del mercado.
“Es urgente tomar medidas rigurosas para prevenir el comercio de la producción de pieles y sus aplicaciones, con el fin de erradicar la crueldad animal y garantizar la protección y el bienestar de los animales”, expuso el senador.
Cabe destacar que Brasil, Estados Unidos, India, Noruega, Países Bajos y el Reino Unido cuentan con legislaciones que protegen a los animales y prohíben su crianza con la finalidad de extraer su piel.