¿Por quién votaré?

Faltan solamente diez días para que las campañas electorales 2018 lleguen a su fin y el panorama no ha cambiado en lo absoluto, porque el mismo escenario que se dio al inicio es el que prevalece y la verdad, no es nada alentador.

 

Las campañas presidenciales son las que están marcando una tendencia muy fuerte en los procesos locales, pero no son las más emotivas y menos aún, las que den certeza de que el país pueda caminar con certidumbre en la transición democrática.

 

Son muchos los factores de la intranquilidad en este proceso electoral presidencial. Por ejemplo, los cientos de asesinatos que se han generado y la debilidad del Peso mexicano, que superó la paridad con el Dólar, al cotizarse a 20.4383 pesos.

 

No hay muchos motivos que fortalezcan nuestro optimismo, por un lado se observa la debilidad del partido gobernante y de su candidato que, aunque técnicamente es el más preparado, también es el más maniatado por un partido y una clase política priista que lo ha controlado desde un principio.

 

José Antonio Meade es un técnico bien formado académicamente y un burócrata que ha sabido  obedecer las órdenes de dos presidentes, uno panista y otro priista, pero que no ha podido consolidar un perfil propio que conecte o persuada al electorado.

 

En cambio el panista Ricardo Anaya no representa el cambio que exigen los mexicanos, hastiados de la impunidad y la corrupción que se fortaleció durante el período presidencial de Enrique Peña Nieto.

 

El queretano es el símbolo del pragmatismo blanquiazul que hoy mantiene dividido a este partido que gobernó dos períodos presidenciales al país, y que lejos de concentrarse en la campaña de Anaya, los grupos panistas ya trabajan para el relevo en la presidencia del comité para desbancar a la actual dirigencia.

 

El empecinamiento y la perversidad de Anaya para controlar su designación como candidato en las elecciones presidenciales, no solo evidenciaron la antidemocracia en el proceso interno de selección, sino que hoy es su peor error en campaña.

 

Sin embargo Andrés Manuel López Obrador muestra la experiencia y fortaleza adquirida en 18 años ininterrumpidos de campaña presidencial, que le han permitido recorrer al país y crear su propio partido para enfrentar el actual proceso electoral.

 

Cuando estamos en la recta final de la campaña el 47% del electorado encuestado por Consulta Mitofsky piensa que Andrés Manuel López Obrador ganará la contienda, lo que es contrastante con el 37% que dijo que sí votará por él el 1 de julio, lo que a pesar de ello refuerza el crecimiento del tabasqueño, puesto que a inicio del presente año solo el 26% pensaba que ganaría la elección presidencial.

 

Esta percepción de que el triunfo de AMLO es inevitable tolera los desaciertos discursivos, el registro de polémicos personajes como candidatos al senado o a una diputación; la falta de propuestas sólidas y con argumentos factibles para combatir la pobreza, la inseguridad e incentivar la educación.

 

Esta creciente percepción le perdona también su lentitud para responder, la opacidad de sus ingresos, la antidemocracia en la selección interna de candidatos, el autoritarismo político y lo desaliñado de su personalidad.

 

¿Por quién votar?

 

El porcentaje de indecisos varía de acuerdo a la casa encuestadora, pero en términos

generales podríamos decir que van desde un 10% hasta un 38%, una porción del electorado que aún no decide por qué candidato emitirá su voto.

 

En contraste con las campañas en Zacatecas el entusiasmo es mínimo puesto que los perfiles de los aspirantes a una alcaldía o al congreso local, nunca lograron posicionar una imagen atractiva o un discurso convencedor, a pesar de los debates que han organizado tanto el Instituto Electoral del Estado de Zacatecas (IEEZ) como universidades y cámaras empresariales.

 

Algunos candidatos zacatecanos han hecho el mejor de los esfuerzos, otros es la primera vez que incursionan en este tipo de procesos y su inexperiencia sale a flote, pero quienes  tienen mayor experiencia decidieron “colgarse” de las campañas presidenciales y subirse a la ola de la preferencia electoral, en especial los contendientes de Morena.

 

Muchos electores zacatecanos acudirán a las urnas a emitir su voto pero con un pleno desconocimiento de los candidatos de su circunscripción o demarcación municipal.

 

En la recta final de las campañas electorales llega el mundial de futbol Rusia 2018 y el electorado tendrá más distractores que motivos para votar, así que las tendencias electorales que han publicado algunas encuestadoras ya no tendrán variaciones significativas en los próximos diez días que restan de campañas políticas.

 

¿Por quién votar?

 

Aún no decido mi voto.

Al tiempo.

@juangomezac

Código políticoJuan Gómez