La senadora Alejandra Lagunes del Partido Verde aseguró que las recientes reformas a la Ley General para el Control del Tabaco, son un avance importante que protegen los derechos de los no fumadores a vivir y convivir en espacios 100 por ciento libres de humo de cigarros convencionales y emisiones de dispositivos electrónicos en actividades deportivas, artísticas, culturales y de entretenimiento, como en el lugar de trabajo y transporte público.
Sin embargo dijo que aún está pendiente de regular los dispositivos electrónicos o vapeadores que no contienen tabaco o nicotina, que de igual forma pueden ser dañinos, por lo que ya presentó una iniciativa para regular este tipo de cigarros electrónicos.
Destacó que es importante esta regulación dado que el uso de cigarrillos electrónicos se ha popularizado entre la población joven de todo el mundo como moda o tendencia, lo cual los hace más vulnerables, aunado a que los fabricantes los han promovido como dispositivos de bajo riesgo, que pueden ayudar a abandonar el tabaquismo.
Su uso se ha extendido rápidamente en adolescentes que nunca han fumado y, como consecuencia, existe un incremento en riesgos a la salud, incluyendo la adicción a la nicotina.
Sin embargo explicó que resulta muy subjetiva la eficacia de los cigarros electrónicos como elementos auxiliares para dejar de fumar, dada la escasez y la poca calidad de las pruebas científicas empleadas para acreditar los supuestos beneficios: “los cigarrillos electrónicos no están aprobados ni validados por parte de la Secretaría de Salud como una ayuda para dejar de fumar”.
Datos indican que de la población de 12 a 65 años de edad poco más de 5 millones lo han usado alguna vez y 975 mil lo utiliza actualmente y entre los adolescentes 938 mil lo han usado alguna vez y 160 mil lo utiliza actualmente.