El presidente Andrés Manuel López Obrador conoce perfectamente Zacatecas. Ha recorrido la gran mayoría de los municipios y conoce también a muchos actores y protagonistas de la política Zacatcana.
En sus tres campañas como candidato por la presidencia de la República y durante su período como presidente de México, López Obrador ha realizado muchas giras en Zacatecas en donde ha hecho diversos pronunciamientos y emitido algunos compromisos, algunos de los cuales no se han concretado.
Por ejemplo el 11 de agosto del año pasado en una visita a Concepcio del Oro, donde se asienta la mina a cielo abierto de mas producción en extracción de Oro del país, mencionó que el fondo minero conformado por impuestos que pagan las empresas dedicadas a la extracción de minerales, “se entragará de manera directa a los habitantes de los pueblos mineros del país. Que no pase ese dinero por muchas manos, por muchas instancias gubernamentales, porque suele no llegar a su destino, se va quedando en el camino”, lo cual evidentemente no ha sucedido.
No solamente el fondo minero se le quitó a Zacatecas sino también el programa 3X1 que se integraba con recursos que envían los migrantes y con recursos públicos estatales y federales. La federación lo suspendió.
Es importante recordar que el siete de octubre de 2018 López Obrador llegó a Zacatecas como presidente electo en una gira de agradecimiento, luego del triunfo de la elección presidencial, en donde dijo que trabajaría de manera coordinada y conjunta con el gobierno estatal. No ha sido así.
Zacatecas sigue olvidado por la federación, en medio de una crisis financiera y sanitaria.
El pasado siete de marzo del presente año, cuando el gobernador Alejandro Tello dio la bienvenida en Jerez al mandatario federal, rememoró que era la sexta visita que hacía el presidente López Obrador.
En esa ocasión AMLO dijo a los jerezanos que no les iba a fallar y que iba acabar, a desterrar la corrupción de México. No es fácil porque hay muchos intereses creados, comentó entre aplausos de la multitud que lo seguía ante la que enfatizó que, así como era terco para llegar a la presidencia, iba acabar con la corrupción en México.
En Jerez, Zacatecas el presidente habló también de la rifa del avión presidencial y reveló que dos empresarios habían comprado boletos para entregarlos al gobierno, para que este a su vez los repartiera entre las 570 mil escuelas del país y pudieran obtener un premio para mejorarlas.
También comentó que está trabajando de manera coodinada con el gobernador Alejandro Tello, porque no se va a crear una dictadura, “somos libres, prohibido prohibir” mencionó ante una entusiasta multitud.
“ Aquí se permite protestar, expresar libremente nuestras ideas, lo que queremos es que haya una auténtica democracia; no vamos a crear una dictadura; en la dictadura no se puede hablar, ahí nada más se protesta con los dientes apretados, en la democracia nos expresamos libremente”, dijo el mandatario.
¿nos peleamos o trabajamos de manera coordinada; pleito o unidad? ¿Quién quiere que nos peleemos con el gobernador Tello? Preguntó a los asistentes provenientes de distintas comunidades aledañas.
Nadie optó por el pleito entre el respeetable.
El presidente justificó lo siguiente: ya cuando vengan las elecciones, porque van a llegar, ahí si hay permiso, ahí si el que quiera pelearse lo pude hacer, cada quien su partido, pero mientras estemos gobernando tenemos que actuar con responsabilidad, no puede haber posturas partidistas.
¿Se acuerdan cómo era antes? Si participaban en un partido ya no le daban nada, ni siquiera despensas ¡El frijol con gorgojo! Ahora no, somos ibres y el gobierno tiene la obligación de escuchar y atender, respetar, de apoyar y proteger a todos los ciudadanos por parejo, precisó enérgico.
En este año el presidente López Obrador llega por segunda ocasión a Zacatecas en medio de una pandemia que ha dejado hasta el 15 de agosto, 517 mil 714 casos positivos y 56,543 muertos por Coronavirus en el país.
López Obrador llegará a Zacatecas sin cubrebocas, como ha sido el ejemplo y mensaje sanitario que ha enviado desde el inicio de la pandemia del #Covid-19, en un estado quebrado, o como dijo el gobernador Tello Cristerna al momento de asumir el cargo, “asfixiado” por el fuerte endeudamiento que dejó irresponsablemente y bajo sospecha de profunda corrupción, el ex gobernador Miguel Alonso Reyes.
Encontrará un estado en “semáforo rojo” en donde la disputa por la candidatura y el control de MORENA en Zacatecas, es parte del escenario político cuando solamente faltan 15 días para que inicie formalmente el proceso electoral 20-21.
Llegará a un estado sin liquidez financiera, con fuertes adeudos a proveedores y con una deuda agobiante; con una crisis de inseguridad por la disputa de la plaza entre cinco cárteles de la droga en el estado, con una actividad turística al borde del colapso.
Ahí en Jerez remarcó que “no habrá impunidad” y ojalá así sea, pero no se ha visto la aplicación cruda de la Ley. El caso Lozoya no es el único que tiene un trato diferenciado, aquí el sábado pasado el ex gobernador Miguel Alonso Reyes fue invitado a una tienta en la ganadería de Torrecillas, propiedad de José Bonilla Robles, a donde asistió con su alfil, Carlos Peña Badillo, mientras que varias denuncias penales duermen el sueño de los justos en las Fiscalías General de la República y en la de Justicia del estado de Zacatecas.
El caso lo conoce perfectamente el presidente Andrés Manuel López Obrador. Hay videos publicados y publicitados en las redes sociales que así lo evidencian.
¿Cuándo actuará?
Mientras en Jerez adelantó que “nos vamos a seguir encontrando” y así será el próximo jueves 20 de agosto.
Aprietan los tiempos electorales. Hay prisa presidencial.
Al tiempo.
@juangomezac