Al encabezar el “Diálogo Mujeres de América por los Derechos y el Bienestar”, organizado por el diario “El País” en colaboración con ONU Mujeres, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que las mujeres al frente de cargos públicos en América Latina, como la primera Vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez Mina, o en Europa con la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social del Gobierno de España, Yolanda Díaz Pérez, representan un proyecto de nación que lucha por la igualdad sustantiva y la justicia social.
“La posibilidad de que las mujeres accedamos a un puesto de elección popular sea una regiduría, sea una presidencia municipal, sea una gubernatura, sea una Presidencia de la República, tiene que ver necesariamente con un proyecto de nación y tiene que ver con la lucha de las mujeres por la igualdad sustantiva. (…) Uno no deja de luchar, no porque yo sea Jefa de Gobierno dejé de luchar, yo sigo luchando en el puesto donde estoy, sigo luchando por la justicia, sigo luchando por la paz, sigo luchando por la fraternidad, sigo luchando por los derechos de todos y de todas y sigo luchando por la igualdad sustantiva de las mujeres”, afirmó.
Durante el evento realizado en el Auditorio “Jaime Torres Bodet”, del Museo Nacional de Antropología, la mandataria capitalina destacó que la lucha por la igualdad incluye la obligación del Estado para facilitar el acceso a otros derechos como el de la autonomía de las mujeres.
“El Estado tiene que garantizar los grandes derechos de nuestros pueblos y, en esos grandes derechos de nuestros pueblos, está también la igualdad sustantiva de las mujeres, es decir, son parte de, no son excluyentes. Y en la lucha por la democracia, luchamos por la participación de las mujeres en cada esfera de la vida pública y también luchamos por la participación de los hombres en cada esfera de la vida privada. Es decir, luchamos por la igualdad, pero luchamos por la justicia social, luchamos por la democracia y luchamos por la erradicación de la pobreza”, subrayó.
En este sentido, Claudia Sheinbaum apuntó que la brecha de género está relacionada también con las condiciones de pobreza que las mujeres enfrentan en diversas latitudes de América Latina, donde una tercera parte no cuenta con ingresos económicos propios; en México, el índice es de 29.4 por ciento; en Brasil es de 26 por ciento y en Colombia 35 por ciento; de acuerdo con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Sin embargo, apuntó que en el país, la Cuarta Transformación de la Vida Pública de México ha priorizado la disminución de desigualdades como uno de sus ejes de acción y ha modificado la idea de que los gobiernos no tienen que participar en el otorgamiento de los grandes derechos.
“Durante años nos tragamos la historia del neoliberalismo, de que los gobiernos no tenían por qué participar en nada, ni en la Educación, ni en la Salud y que eso era un asunto del mercado. Nos tragamos la idea de que todo era un asunto de meritocracia y de esfuerzo propio y no de generación de las condiciones para permitir los grandes derechos. Y eso está cambiando, porque finalmente el neoliberalismo fracasó, por lo menos en América Latina. (…) No porque haya un movimiento conservador que está en contra de los derechos de las mujeres nosotros nos vamos a callar, al contrario, hay que decirle a las jóvenes: Sigan luchando, qué bueno; porque nunca más calladita, te ves más bonita, nunca más”, indicó.
La Vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez Mina, expuso que la presencia de la mujer en espacios de poder significa un cambio, que no puede quedarse en simbolismos y debe reflejarse en un liderazgo que impulse las transformaciones profundas que requiere la sociedad.
“No llegamos a estos espacios de poder solo para ser figuras decorativas, ni floreros, el fin del cambio no está en los despachos de Gobierno, ni en los Ministerios que ocupamos, ni en la vicepresidencia que ocupamos. Creo que el mayor propósito de ocupar este espacio y el poder real, es poder garantizar los derechos de nuestra sociedad, los derechos de transformaciones, de injusticias históricas que han mantenido privilegios de muchos en el poder bajo la exclusión, la marginalidad y el miedo, la violencia que se ha metido en nuestros hogares, en nuestros territorios y en nuestras familias”, expresó.
Añadió que los roles que se la han impuesto a las mujeres, tienen como base la concepción patriarcal del neoliberalismo, que defiende privilegios con discursos de odio hacia quienes buscan la transformación y el bienestar del pueblo.
“La derecha defiende los privilegios históricos a partir de un discurso de miedo a la diferencia y a los cambios, para llegar a un discurso del odio que pretende negar los roles transgresores que estamos proponiendo. Un ejemplo de ese discurso de odio es el discurso de odio que en toda Latinoamérica se está impulsando contra el feminismo. Es irresponsable, porque ese discurso antifeminista deriva con mucha facilidad en la misoginia más perversa y más violenta”, dijo.
Por su parte, la Vicepresidenta Segunda del Gobierno de España y Ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz Pérez, felicitó a la Jefa de Gobierno y a la Vicepresidenta de Colombia, por su liderazgo en la región y las políticas públicas que cada una ha implementado para materializar las demandas históricas de las mujeres.
“Gracias, querida Claudia, por reverdecer la Ciudad de México, por hacerla más segura para las mujeres, por llevar el transporte sostenible a todos los rincones de la Ciudad; gracias por entender que nuestro reto hoy es transformar la evidencia científica en políticas públicas transformadoras. Gracias, sobre todo por predicar con el ejemplo. Y gracias, querida Francia, por materializar una demanda histórica, por crear tantas décadas de lucha, después, un Ministerio de la igualdad y equidad para los colombianos y colombianas”, declaró.
Apuntó la necesidad de construir una integración democrática y laborista, que ponga los intereses de las trabajadoras por encima de los intereses de quienes siempre han gozado de privilegios en América y Europa; y destacó el impulso de las agendas progresistas en la Ciudad de México, Colombia y España.
“Somos nosotras también, las que tenemos la responsabilidad de renovar las relaciones entre Europa y América Latina, entre México, Colombia y España, una nueva etapa entre gobiernos plurales y diversos que tienen, que tenemos el deber de impulsar agendas progresistas en foros internacionales y de apoyar la agenda de mujeres, paz y seguridad en Iberoamérica”, resaltó.
El diálogo fue moderado por la directora del diario “El País”, María José “Pepa” Bueno Márquez; y asistieron la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadine Gasman Zylbermann; la diputada en Francia, Eléonore Anne-Marie Caroit; la prefecta de la Provincia del Guayas, Ecuador, Marcela Paola Aguiñaga Vallejo; la representante de la Cámara de Gobierno de Colombia, Saray Elena Robayo Bechara; la ministra de Educación de Colombia, Aurora Vergara Figueroa; la CEO de “Valiente es Dialogar”, Myriam Mendez-Montalvo; la directora de Sostenibilidad de PRISA, Rosa Junquera; la directora regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, María-Noel Vaeza; la representante de ONU Mujeres en México, Belén Sanz Luque; la representante de ONU Mujeres Colombia; Bibiana Aido Almagro; y la ex subsecretaría adjunta del Pentágono, Ana María Salazar.
Así como integrantes del Gabinete del Gobierno de la Ciudad de México; diputados federales, locales y senadores; Embajadores en México; líderes empresariales; y representantes de la CEPAL y otros organismos internacionales.