Con el propósito de elevar la calidad y eficiencia en el servicio del Sistema de Transporte Colectivo Metro, este jueves entró en vigor el Código de Conducta del Sistema de Transporte Colectivo que establece las reglas de actuación y proceder obligatorias para todos los empleados y funcionarios que se desempeñan en la actual administración del Organismo.
En el STC Metro laboran 14 mil 974 personas con plazas de base y confianza. Todas están obligadas a observar los lineamientos establecidos en el documento firmado por la Directora General de la institución, Florencia Serranía Soto, el cual fue publicado el día 19 de junio en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.
Entre las premisas establecidas para garantizar la prestación de este medio de transporte público con calidad, prontitud, oportunidad y eficiencia en beneficio de los usuarios, se encuentran conceptos como legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad, eficiencia, economía, disciplina, profesionalismo, transparencia, eficacia, integridad y equidad.
Incluye además una serie de valores que todos los trabajadores y funcionarios deben considerar en el ejercicio de sus funciones como prestadores del servicio del Metro, entre ellos, interés público, respeto a los derechos humanos, igualdad, no discriminación, equidad de género y cooperación.
El Código de Conducta del STC tiene como premisa la atención y servicio a las personas usuarias, con calidad, calidez y trato digno, teniendo como prioridad la procuración del bienestar y seguridad de quienes utilizan esta red de transporte.
En este marco jurídico y ético para prevenir posibles conductas ilícitas o actos de corrupción, la presente administración también considera el respeto a sus trabajadores, por lo que señala que debe darse a los trabajadores del Organismo “un trato justo, observando prácticas laborales basadas en la equidad y en la mutua cooperación dentro del marco de principios, valores y directrices del servicio público”.
El Código de Conducta del STC menciona una serie de acciones para mantener la austeridad y disciplina en el ejercicio del gasto y administración de los bienes y servicios públicos del Sistema de Transporte Colectivo, las cuales incluyen el uso racional de los servicios e insumos, como los servicios de telefonía, fotocopiado, impresión y correo electrónico.
Finalmente, el documento señala que la capacitación a los trabajadores del Metro se mantendrá a través de su Instituto de Capacitación y Desarrollo (Incade), bajo los principios, valores y directrices que conforman el Código de Conducta del Sistema de Transporte Colectivo.