Para celebrar el Día Internacional del Elefante, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, a través de la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre, preparó diversas actividades de enriquecimiento ambiental especiales para Ely y Gipsy, las elefantas africanas que habitan en el Centro de Conservación de la Vida Silvestre de San Juan de Aragón, donde avanza satisfactoriamente su proceso de acoplamiento.
Cada 12 de agosto se celebra este día para generar conciencia sobre la compleja situación que enfrentan estos mega-vertebrados, los mamíferos terrestres más grandes del mundo y que actualmente se encuentran en grave peligro de extinción. El cuidado de las elefantas africanas y del resto de las especies silvestres que habitan en este Centro de Conservación de la Vida Silvestre, constituye una prioridad para todos los cuidadores, biólogos, médicos veterinarios y el resto del personal a su cargo.
Cabe recordar que, derivado de las recomendaciones de expertos en diferentes aspectos del manejo, la salud y el bienestar de la fauna silvestre, el pasado 25 de junio la elefanta africana “Gipsy” fue trasladada a San Juan de Aragón, gracias al apoyo y colaboración del Centro de Conservación Zoofari, de Morelos, para hacer compañía a nuestra querida Ely e iniciar el proceso de acoplamiento, promoviendo las condiciones necesarias para el bienestar de ambas elefantas.
“A seis semanas de distancia (el acoplamiento) va muy bien, observamos muchas conductas afiliativas entre las elefantas, que es lo que se busca en este proceso de habituación y reconocimiento; este tipo de conductas que muestran entre ellas permiten desarrollar un vínculo una vez que ya se conocieron”, destacó el director General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre de la Sedema, el médico veterinario Fernando Gual Sill.
Buscarse y tocarse con la trompa, olerse, incrementar ciertas vocalizaciones, comer y descansar una a un lado de otra, son ejemplos de este tipo de conductas afiliativas que han manifestado Ely y Gipsy; todo este proceso está siendo monitoreado por el personal del área de bienestar de San Juan de Aragón con experiencia en la observación y el registro de la conducta animal, con el apoyo de especialistas en etología veterinaria de instituciones académicas.
Fernando Gual aclaró que estas conductas aumentaron en las últimas dos semanas del acoplamiento, al grado de que las dos elefantas africanas han compartido alimento.
“Todo esto nos indica que el acoplamiento va por muy buen camino y que pronto van a poder compartir el mismo hábitat al mismo tiempo”, añadió el también el maestro en ciencias de la salud en fauna silvestre.
Por ahora, las elefantas continúan ocupando dos espacios contiguos del albergue, desde los cuales se pueden ver, tocar, oler, comer y descansar una a un lado de la otra a muy poca distancia, lo que es parte de un proceso gradual de acoplamiento seguro, monitoreado por los especialistas y con todo el esfuerzo de los cuidadores de las elefantas que han hecho un gran esfuerzo y un excelente trabajo para llevar a cabo todos los cuidados de rutina de las dos elefantas durante este proceso, creando ese vínculo tan importante que formaron con Ely, ahora con Gipsy, la cual disfruta de todas estas actividades diarias y ha mostrado una excelente adaptación a su nuevo entorno, a sus cuidadores y a su nueva compañera Ely.
Gual Sill añadió que antes de la llegada de Gipsy se duplicó la superficie del albergue de Ely, al construirse una ampliación del recinto, lo cual también contribuye a las condiciones de bienestar de ambas. De hecho, la superficie total del hábitat para esta especie en San Juan de Aragón es adecuada para albergar al menos a 10 elefantes al mismo tiempo, de acuerdo con estándares internacionales.
“Tenemos la fortuna de poder llevar a cabo este acoplamiento tan importante para el bienestar de las dos elefantas en el Centro de Conservación de la Fauna Silvestre de San Juan de Aragón y en unas cuantas semanas seguramente los visitantes podrán conocer a las dos elefantas”, comentó el director General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre.
Por el momento, se solicita la comprensión de las y los visitantes ya que con el objeto de evitar distracciones del personal y las dos elefantas, el acceso al área está restringido para continuar los trabajos de acoplamiento.
Ely y Gipsy habitaron en circos de México desde muy jóvenes antes de ser trasladadas a los zoológicos y es posible que se hayan conocido previamente, sin embargo, no se tiene un registro al respecto. Permanecieron en este tipo de espectáculos hasta que se promovió la prohibición del uso de animales en los circos, motivo por el cual se decidió su rescate mediante la compra de Ely y Gipsy por parte del Gobierno Capitalino y Zoofari respectivamente.
En el Día Internacional de los Elefantes, recordamos que estos majestuosos mamíferos se encuentran en la lista roja de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), por lo que la labor del Centro de Conservación de la Vida Silvestre de San Juan de Aragón contribuye a la conservación de esta especie y de otras que se encuentran amenazadas y en peligro de extinción debido al tráfico ilegal, la cacería y la destrucción de su hábitat, entre otras causas.
Fernando Gual recordó que los zoológicos alrededor del mundo han contribuido a que 25 por ciento de las especies de vertebrados que se encontraban al borde de la extinción, se alejaran de este escenario, y los Centros de Conservación de la Fauna Silvestre de Chapultepec, San Juan de Aragón y Los Coyotes han ayudado en la recuperación de distintas especies en peligro de extinción como el lobo mexicano, el cóndor de California y el axolote de Xochimilco.
Diariamente el equipo de cuidadores, médicos veterinarios y biólogos de San Juan de Aragón realizan diversas actividades para garantizar la salud y el bienestar de Ely y Gipsy, a través de una nutrición y alimentación balanceadas, un manejo adecuado a la especie, acciones de medicina preventiva y otros cuidados necesarios. Así mismo a través del manejo de ambas elefantas, se monitorea su estado de salud y reciben la atención médica veterinaria especializada en su caso. Así mismo se desarrollan estrategias y actividades de enriquecimiento ambiental con el objeto de fomentar la actividad en estos ejemplares, promoviendo comportamientos de acuerdo con la biología de cada especie, incluyendo diversos “juguetes” interactivos, actividades de búsqueda de alimentos, actividades que estimulan los diferentes sentidos como el olfato, la vista, el oído, el tacto, el gusto, además de desafíos cognitivos y adecuaciones a su entorno.
Gual Sill destacó la colaboración de diversas instituciones, como la AZCARM, Zoofari, Africam Safari, entre otras, así como a los expertos de diversas universidades como la UAM y la UNAM para trabajar por el bienestar y la conservación de esta especie.
“Nos da mucho gusto atender a las diferentes especies silvestres y específicamente a estas dos elefantas africanas que durante muchos años estuvieron en esa situación de circo y hoy en día tenemos la gran oportunidad de llevar a cabo los cuidados y acciones necesarias para promover su salud y bienestar en el Zoológico de San Juan de Aragón, incluyendo este proceso de acoplamiento mediante el cual podrán convivir y acompañarse muy pronto”, concluyó.