Fue en el Teatro de la Juventud donde se llevó a cabo esta ceremonia de graduación de la tercera generación de las maestrías en “Gestión Pública para la Buena Administración” (GPBA) y en “Gestión Integral del Riesgo de Desastres” (GIRD).
Ahí, el maestro Pablo Yanes indicó que tomar la decisión de inscribirse a una maestría no es suficiente, “se debe persistir, preservar, terminar y recibir el grado. Lo anterior habla de una voluntad de superación y compromiso, basado en el mejor esfuerzo”.
El funcionario argumentó que los dos posgrados son asuntos estratégicos de la Ciudad. Sobre la maestría en GIRD externó que contar con una política integral de gestión de los riesgos de desastres es un tema vital para la urbe, la cual requiere de los estándares más altos de profesionalización, capacitación y formación.
Destacó que la maestría en GPBA es una manera de materializar el derecho a la buena administración. “No es simplemente una mejor práctica, es un derecho constitucional de la ciudadanía, tanto individual como colectiva”.
Finalmente, se refirió a los egresados como personas servidoras públicas comprometidas, que ponen un esfuerzo adicional para capacitarse, formarse y contar con mejores herramientas.
En su oportunidad, la arquitecta Myriam Urzúa Venegas, titular de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) de la Ciudad de México, comentó que los 181 egresados no sólo están comprometidos con la excelencia académica, sino también con el servicio público.
Recalcó que la profesionalización de los servidores públicos no es un lujo, sino una necesidad imperante en un mundo que demanda respuestas ágiles, responsables y con visión a largo plazo, enmarcados en un mundo cada vez más complejo y cambiante.
Por su parte, el doctor Hegel Cortés Miranda, director general de la Escuela de Administración Pública (EAP), expresó que terminar una maestría no es tarea fácil, y resaltó que la institución que preside ha evolucionado con una identidad propia.
Nuestras maestrías, dijo, iniciaron en 2017 con una matrícula aproximada de 134 alumnos, y hoy, cuenta con 789 estudiantes. “En esta administración se aumentó considerablemente el número de inscripciones para lograr tres generaciones en los últimos dos años”.
Cortés Miranda subrayó lo que la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, ha señalado en reiteradas ocasiones: “el recurso público de la Ciudad debe aplicarse en la construcción de la infraestructura universitaria”.
En su mensaje, el licenciado Humberto González, jefe de la Oficina de la alcaldía Álvaro Obregón, en representación del titular de la demarcación, Javier López Casarín, refirió que la ceremonia celebra el esfuerzo y culminación de un ciclo formativo de vida; y que es a través de la educación cuando se generan ciudadanos críticos, solidarios y participativos.