El escándalo de propiedades descubiertas a ex Presidentes, hijos de Presidentes y de secretarios de Estado, ha sido el pan de cada sexenio.
Desde luego que son propiedades de precios ofensivos que rayan en el doble discurso de los propietarios o sus parientes y jefes.
Primero, fue la Casa Blanca de Peña Nieto, la propietaria, su afortunada esposa, la actriz Angelica Rivera conocida en las telenovelas como La Gaviota.
Ese inmueble tenía un costo aproximado a los 80millones de pesos y la denuncia, de los entonces opositores de la izquierda es que no concebían ese abuso de derrochar recursos en la pareja Presidencial.
En esta administración, salió la Casa Gris, un suntuosos inmueble o mansión que habitaba el hijo del Presidente Andrés Manuel López Obrador en Houston, Estados Unidos.
Esa propiedad la tenía en arrendamiento, sin embargo, la senadora Xóchitl Gálvez exhibió que la propiedad resultó ser de un empresario petrolero que recibió, la empresa donde es socio contratos millonarios del gobierno federal.
Naturalmente que no gustó al Presidente que exhibieran a su hijo, respondió queriendo argumentar pero la denuncia se viralizó y lamentablemente para el que manda en Palacio Nacional no pudo hacer nada.
El empresario prácticamente rentaba la casa al hijo del Presidente para vivir en familia en esa zona de Estados Unidos, un auténtico acto de corrupción por incurrir en el presunto conflicto de interés.
Acusaron, también que su esposa; Carolin, Adams, era quien conocía al empresario, pues basta recordar que ella trabajó en el sector petrolero, aunque la final lo negó conocerle.
Ahora salió la Casa Verde, se trata de una residencia departamental en Huixquilucan propiedad del Secretario del Defensa, Luis Crescencio Sandoval.
La denuncia pública de mexicanos contra la corrupción, es que se trata de un departamento que compró a una empresaria que tiene contratos con esa secretaría de la Defensa.
El inmueble, da cuenta la investigación difundida, es de 407 metros cuadrados con un valor de 9 millones de pesos, aunque la realidad su valor pude oscilar entre los 28 a 30 millones de pesos, de acuerdo a comparativos similares en esa zona.
La empresa que vendió la propiedad es Protective Materials Technology SA de CV, con socias Alejandra Aguilar y su hermana Elisa. Actualmente es proveedora de la Sedena, la misma que ha recibido contratos con fecha del 10 de febrero del 2022 por 319 millones 430 mil pesos para dotar a la dependencia de 48 mil juegos de placas balísticas. Señalan, sin embargo, que ese contrato esa empresa incumplió por no entregar las piezas el 10 de junio de ese año dentro del plazo estipulado, posterior fue canelado por el director de fabricas de vestimenta y equipamiento de esa Secretaría. No paso nada.
Hace días en otra denuncia habían exhibido los suntuosos viajes del general y su familia que ocupaba, incluso aeronaves de la Sedena. Tampoco paso nada. El Presidente López Obrador ha defendido a capa y espada al General Secretario, pues no lo baja de ser una persona honesta y muy correcta.
Conforme se acercan las elecciones para la sucesión Presidencial, sigue saliendo lodazal de actos de corrupción que, quiérase o no se han convertido en una negra mancha para esta administración. La misma que, desde su llegada alzo la voz para gritar a lo cuatro vientos que no son iguales a los anteriores y para ello sería su eje central el combate a la corrupción.
SUELTAN LA PREGUNTA PARA CONSULTA CONTRA MINISTROS
Ayer el coordinador de los diputados, Ignacio Mier junto con Mario Delgado adelantaron el pleito contra lo ministros de la Corte que los quieren llevar a una Consulta Pública para conocer si los ciudadanos están de acuerdo a una Reforma a la Constitución para que sean elegidos por el voto popular y no designados por el Presidente en turno y los Senadores.
Ese pleito está más que casado por el propio Presidente López Obrador contra los ministros que no les perdona, primero que le hayan tirado el proyecto de llevar a l presidencia de la Corte a su candidata Jazmín Esquivel, segundo que la hayan exhibido que se plagió su tesis y, tercero, que hayan votado en contra de su plan B.
Por ello, Ignacio Mier soltó que ya tienen la pregunta para esa consulta de la elección ellos ministros: ¿Merece México o no, las mexicanas, hacer uso de su derecho de participar en un procedimiento que modifica el procedimiento que establece el 96 constitucional para la designación de ministros? Esa es la pregunta. Así de fácil, y así de sencillo.
Desde luego que hay preocupación en el grupo del senado, donde su líder Ricardo Monreal sabe que será complicado porque no se tiene los votos, pues para ello se necesita cabildear con los priistas y panistas para acceder a esas dos terceras partes pero ante los sistemáticos ataques del Presidente López Obrador contra la oposición, simplemente se ve fuera de alcance.